La organización agraria ENBA de Gipuzkoa ha celebrado su Asamblea Ordinaria esta mañana en la Escuela de Música de Tolosa con la participación de numerosos  asociados a la organización; el diputado Rafa Uribarren por la Diputación Foral de Gipuzkoa, parlamentarios del Parlamento Vasco, Junteros gipuzkoanos, el alcalde  de Tolosa y con las palabras del consejero delegado de IPARLAT, Javier Yarnoz, que ha tratado de informar a los productores sobre las consecuencias del incendio sufrido por la central lechera.

Tras la Asamblea, la organización celebró su tradicional almuerzo de hermandad en la sidrería ISASTEGI de Tolosa degustando productos todos ellos autóctonos.

En el transcurso de la Asamblea se procedió a la renovación de la Junta Directiva, siendo reelegido nuevamente y por unanimidad Mikel Arteaga como presidente de la organización.

Tras su reelección y tras agradecer a los socios la confianza depositada en el equipo que lidera, Mikel Arteaga, ha presentado su informe anual dando numeroso datos de renta, producción y precios  con los que ha mostrado el difícil momento que viven nuestros productores.

 

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Ahora bien, Mikel Arteaga, ha destacado que ha llegado el momento donde además de protestar por la crisis y la falta de apoyo a los baserritarras, los productores deben dar un paso adelante y organizar su propia estrategia para mejorar aspectos como el valor añadido, la comercialización y la relación con los consumidores.

Arteaga ha abogado porque el sindicato debe desarrollar nuevas estrategias y las herramientas acordes para el cumplimiento de los objetivos prefijados que no son otros que la estructuración y reorganización de los productores, la promoción de nuestros productos entre nuestros conciudadanos, impulsar estructuras comercializadoras para nuestros productos de calidad y promover una alianza con otros sectores (hosteleros, consumidores, distribución, etc) para una mejor comercialización y consecuentemente, una mejor retribución al productor.

 

En un entorno donde nuestros productos son gestionados y llegan al consumidor final a través de agentes ajenos y a veces incluso antagónicos a nuestros intereses, Arteaga dice que ha llegado el momento de reequilibrar la cadena alimentaria, acabar con los abusos de la distribución, reconducir las prácticas perjudiciales de industrias y comerciales que se valen del buen nombre de nuestros productos para incrementar sus beneficios y asentar las bases organizativas para que los productores seamos protagonistas de todas las facetas que engloba la cadena alimentaria y muy especialmente, aquellas que hemos tenido más olvidadas últimamente, como son la promoción y la comercialización.

Arteaga ha finalizado su intervención en la Asamblea diciendo “Tenemos que ser los baserritarras quienes hagamos real el dicho «del caserio al plato» para que el mayor margen de los eslabones finales alcance a los productores”